A punto de comenzar la Semana más importante para los que creemos, tú, Manolo, te has adelantado a celebrar la Vida con mayúsculas, y el Amor que nos crea y acompaña, te ha llamado para que descanses y estés ya a su lado, para siempre. Descansa en paz, Manolo. Te lo mereces.
Nos gusta esta imagen tuya, Manolo, con la que queremos hacerte memoria agradecida: Caminando y hacia abajo.
Desde Verapaz, creemos que ésa ha sido tu vida:
Siempre en camino. Tú has sido un gran buscador. Tú no te acomodabas fácil, ni te gustaba lo establecido. Tú buscabas y partías hacia aquello que entendías, aunque supusiera para ti desinstalarte. Partiste a Guatemala, tres años allí. Buscando estar, conocer y querer otra cultura, y a sus gentes. Nunca los olvidaste. Partiste a Vallecas, buscando un proyecto de Familia Dominicana, con una misión de cercanía a la gente... y tras unos años, volviste a tu Vigo querido, donde tanta vida y entrega has dejado. Donde tanto has querido y tanto te han querido.
Y hacia abajo.. Sí, era tu estilo. No buscabas brillar. Sólo ofrecer. No buscabas aplausos, sólo aportar. No buscabas estar entre los que tienen y saben y aparentan. Tú preferías estar con los de abajo, con los que no cuentan, con los humildes, con el pueblo. Por eso te queríamos tanto. Porque te acercabas, con discreción, sin ruido, pero estabas. Creando comunidad, en horizontalidad. No te gustaban los primeros puestos. No los buscabas, Contigo era fácil sentirse a gusto, porque tu presencia hacía bien en el alma. Tenías facilidad para que el protagonista fuera el otro. No tú. En Vallecas, te hemos visto ser el primero en coger la escoba, ir a la compra, al mercadillo, para estar con la gente. Donde está la gente, la más humilde. Te hemos visto visitar a los más pobres, a los que, aparentemente, no tenían nada que ofrecerte. Ahí estabas…
Por eso, también, amabas tanto a Verapaz, que sabes que sus preferidos son los de abajo, los sin voz... Desde el principio, desde su creación, estuviste vinculado a ella. La implantaste en Vigo. Te ilusionaba trabajar en algún proyecto de los más empobrecidos. Tú los conocías y querías hacer todo por ellos. En Vallecas también participaste en el grupo, en sus actividades, en sus charlas, en los desvelos por los más olvidados. Y coordinaste la Comisión de Derechos humanos, durante 15 años. Al final, ya tu enfermedad no te permitía participar. Pero, año tras año, estuviste fiel preparando la Jornada, para mantener vivo el que a Verapaz le importan, y mucho, los Derechos humanos, en especial, la formación y sensibilización sobre aquellos ámbitos y realidades donde no se cumplen y están más vulnerados. Ahí estuviste, fiel, muy fiel. Y te lo agradecemos de corazón.
Gracias, Manolo, por tu lucha incansable en este sentido. Por todo lo que nos ofreciste a tu paso, por todo lo que aprendimos de ti, siempre creando un estilo nuevo, una manera nueva de estar. Nos atrevemos a pedirte un favor: sigue acompañándonos. Sigue fortaleciéndonos a los que aún estamos por aquí, para que no nos despistemos y nuestro paso por esta vida sea como el tuyo, en camino, y hacia abajo.
Dulce Carrera
Algunas imágenes de su paso entre nosotros
https://www.accionverapaz.org/informate/noticias/2929-en-memoria-de-manolo-sordo#sigProIdd046183237