Acaba de celebrarse el Tercer Encuentro del Curso de Voluntariado. Como otras veces aquí tenéis la crónica escrita por sus protagonistas.
¿Qué queremos ser? ¿Cómo queremos vivir? Por encima de todo, creemos que un proyecto de vida le otorga sentido al presente. Y también creemos que, seamos conscientes de habérnoslo planteado o no, lo hemos hecho frecuentemente. Sabemos con qué causas nos sentimos identificados, con qué gente, cómo nos gustaría usar nuestro tiempo, qué ideales tenemos y en qué valores creemos. Vemos dificultades pero somos capaces de sobreponernos, así la toma de decisiones nos lleva de un sitio o a otro. Esta ha sido la temática central del tercer encuentro.
Huyendo un poco del detalle y la cronología que se suponen inherentes de una crónica, y teniendo en cuenta que hemos llegado al final del curso, mientras escribimos esto pretendemos también inducir un poco a la reflexión de todos. Por supuesto, no han faltado las dosis de buen humor y cerveza, también inherentes a este grupo. Es curioso darse cuenta de que gente tan dispar compartamos muchas de nuestras inquietudes. Supongo que si no, no estaríamos aquí.
Nacho nos habló de la idea de proyecto y de su extrapolación a la vida, de la importancia de ser fieles a nosotros mismos, de no olvidar que somos el epicentro de nuestras divagaciones en el andar de nuestro camino, y de la realidad de estar preparados porque la vida puede obligarnos a dar un giro a nuestro proyecto. A veces sentimos que nos equivocamos, que fallamos, pero no pasa nada, la próxima vez fallaremos mejor.
Qué decir sobre el testimonio de Manolo y Almudena. Creemos que resultó para todos igual de sobrecogedor y digno de admiración. El hecho de que habitualmente cueste encontrarse con tanta generosidad lo hizo aún más especial. Lao-Tse dijo: “Ser profundamente querido te da fortaleza, querer profundamente a alguien te da valor.” Sus anécdotas y relatos estaban llenos de entusiasmo y expresividad. ¡Qué vida la suya! ¡Cuánta belleza en la diferencia cultural! Tan distintos y a la vez tan iguales.
Tatiana y Lucas tuvieron un efecto hipnótico sobre nosotros. Compartieron su experiencia en Uganda y Haití, analizando las condiciones en estos países desde la visión del voluntario, de la crítica a instituciones internacionales como la ONU y la realidad del ciudadano criollo. Era la primera vez que teníamos una perspectiva tan caleidoscopia. La importancia y lo maravilloso de conocer el porqué de las cosas, conocer lo que significa en uno u otro lugar mantener la mirada del otro y la herencia que deja la historia en las personas, la cultura y la manera de relacionarnos… El valor de las pequeñas cosas nos fue dado en bolsas llenas de detalles, palabras en Times New Roman e imágenes que apelan al Buen Humor, desde luego ¡una buena forma de acercarse a la vida!
El Señor Lobo, como ya ocurrió en Pulp Fiction y como no podía ser de otra manera…, se presentó como un facilitador y puso sobre la mesa un puñado de proyectos a los que nos invitaba a participar, contactos para nosotros de gentes de todo el mundo, sus vivencias y sus buenos ánimos. Antes de conocernos ya nos conocía… en fin,¡ espectacular! Solo nos queda haber conocido a Dulce, personaje esencial que se queda en el anonimato manteniendo un halo de magia y esencia pululando por entre nosotros.
Para despedirnos, lo hacemos con un diálogo de la película Un lugar en el mundo, que provocó algunas microsiestas, borbotones de lloros y algunas reflexiones:
- Me gustaría que me dijeras cómo hace uno para saber cuál es su lugar.
- Yo por ahora no lo tengo. Supongo que me voy a dar cuenta cuando esté en un lugar y no me pueda ir.
- Supongo que es así.
Álvaro Muñoz, Alma Domingo
Imágenes del encuentro:
https://www.accionverapaz.org/informate/noticias/9-noticiasdestacadas/1601-continua-el-curso-de-voluntariado#sigProId074e66f9e6