“El crecimiento de la desigualdad y la pobreza pone en peligro la democracia. Hay que crear mecanismos de tutela de los derechos laborales y del medio ambiente…. Por otra parte, el crecimiento de la desigualdad y la pobreza ponen en peligro la democracia inclusiva y participativa que siempre presupone una economía y un mercado que no excluya y que sea justo”.