Mahotière es un pueblo de Haití rodeado de montañas. La población de este lugar trabaja la tierra y la ganadería para sobrevivir, pero no tiene acceso a ningún tipo de infraestructura social y su agricultura es de autoconsumo, es decir que no obtienen ningún beneficio con su comercialización y, al no poder ganar dinero con ello, no pueden pagar la escolarización de los niños, la sanidad, ni otros bienes necesarios para vivir dignamente.
El terremoto y los huracanes pasados dificultaron, además, los accesos por los caminos, así que la asociación Movimiento de Agricultores para el Desarrollo de Mahotière nos pidieron medios para comprar 20 mulas para 40 mujeres. Las mulas son fuertes y pueden bajar del monte para que las mujeres, que son quienes se dedican al comercio, lleven los productos de sus huertos a los mercados.
Cada mula es responsabilidad de dos mujeres que la cuidan y se organizan para sus servicios. También se valdrán de ellas para poder acercar a los enfermos al centro de salud más próximo. Con el dinero que saquen en los mercados podrán mejorar su agricultura, llevar a los niños al colegio, variar un poco su nutrición, etc.
El proyecto ha sido posible gracias a esta asociación, que también ha dispuesto de veterinarios voluntarios, y al esfuerzo de todos los que contribuyeron con los 9.800 € que la parroquia de Chelva, de Valencia ha aportado para la compra de las mulas.