El fin último del proyecto era reforzar la seguridad alimentaria de las familias campesinas de Bainet. Para ello se identificaron varias tareas que se ejecutaron a lo largo de los tres meses de vida del proyecto.
En primer lugar se organizaron cursos de formación en técnicas modernas de laboreo, en la fabricación y utilización de compost (abono natural) y en la aplicación del cultivo agroecológico para combatir la erosión de la tierra cultivable, así como nociones imprescindibles para la cría de cabras. Posteriormente se distribuyeron entre las familias campesinas beneficiarias aperos como azadas, podaderas, picos y machetes, además de semillas de guisantes, maíz y leguminosas y cabritas para criar.
Para dar continuidad al proyecto AUSAPDE-Haití firmó un contrato de redistribución con las familias beneficiarias. Estas se comprometieron a entregar una cabrita de la nueva camada y una parte de las semillas después de la cosecha para repartir a otras familias no beneficiadas por el proyecto en el momento de su lanzamiento. Así mismo las familias campesinas beneficiadas al principio serán las encargadas de transmitir las enseñanzas recibidas, tanto en lo que concierne al desarrollo de la agricultura como de la cría de las cabras. Los responsables de AUSAPDE garantizan de este modo que una vez finalizada esta primera fase dentro de dos años otras 100 familias campesinas se habrán beneficiado del proyecto.